La Junta miente, tergiversa y adoctrina con la memoria histórica de la Segunda República y la Guerra Civil.

Panteón del cementerio de Estepona donde reposan 36 de los 56 asesinados por los comunistas, socialistas y anarquistas de  Casares durante la "dominación roja" (Julio 1936-Octubre 1936).  Entre esos 36 asesinados figuran un mínimo de diez tios, primos y sobrinos familiares directos de Blas Infante Pérez, cuya familia fue masacrada por éstos en el pueblo natal del "padre de la patria andaluza".  El panteón fue costeado por las propias familias de los fusilados y jamás han recibido un reconocimiento.  Antonio Murcia alcalde comunista de Estepona en la Transición eliminó la referencia a sus muertes inscrita en el panteón.

Su proselitismo político les sale gratis y nos cuesta el dinero a todos. Habrá que pedir explicaciones a quienes desde universidades e instituciones se sumen a tal manipulación de la verdadera Historia.

Recientemente hemos conocido que la Junta de Andalucía hará una Ley sobre memoria histórica aún más sectaria que la ya existente, para la cual,sin que aún esté promulgada la misma, ya tenemos al alto cargo que la dirigirá: un comunista. Los partidos que conforman hoy el gobierno andaluz andan muy interesados en lavar o desviar la atención de los crímenes por ellos cometidos durante la República y Guerra Civil, y se empeñan en mentir o tergiversar la realidad para seguir engañando a las nuevas generaciones de andaluces. Para ello no dudarán en poner en marcha hacia ese objetivo a todas las instituciones tuteladas por la Junta de Andalucía, al algur del "conocimiento de la verdad", la misma que ellos quiern ocultar. Y veremos subvenciones, fundaciones, etc, y su propaganda les saldrá gratuíta por que la pagaremos nosotros, los engañados, timados; porque todo es una farsa.
      No puedo por menos que esbozar una sarcástica sonrisa cuando oigo a algunos responsables políticos (ayer leía al alcalde de Istán, de IU ¿cómo no?), homenajear o pedir homenajes a personas que, según este listo, murieron por sus idelales. ¿Se homenajearán también al mínimo de ocho vecinos del pueblo, matodos por los coumunistas y que también murieron por sus "ideales"?
       Claro que omiten en muchos casos, que por esos ideales mataron, y que su muerte fue el resultado de tal circunstancia a la que le ¿obligaron sus ideales?. ¿No hay límites a los "ideales"? ¿Se puede matar entonces por los ideales?. Si es así, ¿qué reprochamos a Franco? Franco  inició una sublevación militar contra una revolución política provocada por los "ideales" de otros, que ya habían causado 5.000 muertos en la "democrática" Segunda República. Una república que de democrática sólo tuvo un mes, si acaso, de los cinco años que duró.

Continuará