14 marzo 2011

Cuatro directivos de Cajasol, presidida por el socialista Antonio Pulido, disfrutan de una renta vitalicia pese a no prestar servicios a la caja.


Los directivos de Cajasol cobraban rentas vitalicias aunque no prestaban servicios

2011-03-14

El ex director general adjunto de la caja El Monte (ahora integrado en Banca Cívica), Alberto Alonso Lobo, ha declarado como imputado en una pieza separada del caso Malaya contra la corrupción urbanística en Marbella (Málaga). Presuntamente, Lobo concedió un préstamo de 7,8 millones de euros a una empresa inmobiliaria. Los otros imputados son el ex gerente de El Monte Fernando Faces García, el ex director general Juan Pedro Álvarez Jiménez, y el ex secretario de la caja sevillana José Manuel Giménez Fernández
Alonso Lobo, ex director general adjunto, declaró el pasado miércoles ante el titular del Juzgado de Instrucción 1 de Marbella y, al igual que los restantes imputados, defendió que fue una operación normal que se concedió al empresario Luis Portillo porque era un buen cliente, de solvencia acreditada, y además se devolvió en su integridad. Por tanto, no sabía nada de la presunta operación de blanqueo de dinero.

La operación investigada deriva de un suelo que había sido objeto de expropiación forzosa por parte del Ayuntamiento de Marbella que luego fue vendido a Portillo cuando Jesús Gil ocupaba la alcaldía. La imputación de los ex directivos de El Monte se fundamenta en que conocieron las circunstancias, actuaron en perjuicio de los expropiados o conocían el destino de la operación, el blanqueo de dinero.

La operación se firmó en 1999 y se devolvió en su integridad, por lo que los ex directivos sostienen que no causó ningún perjuicio a la entidad bancaria y, además, el presunto delito estaría prescrito por haberse cometido hace doce años.

Coincidencias asombrosas

Pero lo sorprendente de algunas coincidencias es que Cajasol, presidida por el socialista Antonio Pulido, pagaba una renta vitalicia a cuatro exdirectivos de El Monte que son, precisamente, Juan Pedro Álvarez Giménez (director general) Fernando Faces García (director general gerente, ya jubilado), Alberto Alonso Lobo (director general adjunto) y José Manuel Giménez Fernández (secretario general). Todos ellos cuatro disfrutan de esa renta vitalicia pese a no prestar servicios a la caja. El contrato, además, les permitía capitalizar la citada renta a voluntad, así como que la entidad de ahorro debería constituir una póliza de seguro colectivo de prestación a favor de esos cuatro directivos para asegurar la percepción y sin imputación fiscal para los beneficiarios, póliza que además recogería que en caso de fallecimiento del empleado en activo, sus beneficiarios recibirían las prestaciones previstas. Estos hechos fueron denunciados por El País.

Estas asignaciones asombrosas están incluidas en la agenda incluida en el Acuerdo de Previsión Social Complementaria de diciembre de 2000 y avalada por el comité de empresa representado por Comisiones Obreras. En el escrito se le llama "la percepción, con carácter vitalicio, de una renta anual revisable, cuyo importe coincidirá con el último salario anual como activo más las revisiones anuales correspondientes".

El País no ha mostrado mucho interés en conocer por qué Antonio Pulido, actual presidente de Cajasol, sigue abonando tales percepciones. Tampoco parece querer saber por qué Griñán, hasta 2009 consejero de Economía y Hacienda y responsable de las inspecciones de la Junta, guardó silencio sobre el particular.

Más coincidencias: Operación Nochebuena

La operación Nochebuena, realizada con el apoyo necesario de Manuel Chaves, fue el desesperado intento de sostener la cotización de la inmobiliaria Colonial, regida entonces por Luis Portillo, en bolsa, con el respaldo de la Oficina Económica del Presidente del Gobierno en La Moncloa y el dinero que debían aportar las seis cajas de ahorro de Andalucía, cuyos presidentes fueron convocados a una reunión de urgencia que debía celebrarse en Sevilla en la mañana del lunes 24 de diciembre, día de Nochebuena de 2007. La operación fue destapada por El Confidencial.

En efecto, en la mañana del sábado 22 de diciembre, los presidentes de las entidades de ahorro andaluzas fueron contactados por responsables de la Junta de Andalucía para asistir a una reunión en Sevilla, en la cual se iba a tratar la situación de Colonial y la forma de ayudar a la inmobiliaria a salir del bache, operación que contaba, con el pleno respaldo del Gobierno, de David Taguas y, naturalmente, de Manuel Chaves.

Pero los distintos responsables de Cajas, con excepción de Antonio Pulido, hombre de confianza de Manuel Chaves y actual presidente ejecutivo de Cajasol manifestaron enseguida su deseo de escurrir el bulto enviando a la reunión sevillana a representantes de segundo nivel, en un movimiento destinado a eludir la toma de cualquier compromiso que pudiera comprometerles. La reunión en cuestión se celebró, en efecto, en la mañana del 24 de diciembre pasado.

Entre los oficiantes del cónclave estaba, cómo no, el más que amigo de Portillo y alcalde socialista de Dos Hermanas Francisco Toscano Sánchez, responsable en gran medida de la deslumbrante irrupción inicial de Portillo en el mundo del ladrillo. Junto a Toscano, José Antonio Viera Chacón, ex delegado del Gobierno en Andalucía, ex consejero de la Junta y actual secretario provincial del PSOE de Sevilla, además de número dos de la lista de Sánchez Monteseirín a la alcaldía hispalense, entre otros cargos, siempre ligados al PSOE andaluz. A los reunidos se les explicó que el plan consistía en sostener la cotización de Colonial en Bolsa mediante la aportación de 100 millones de euros que serían proporcionados de forma alícuota por las Cajas. De acuerdo con las fuentes, "a los reunidos se les informó que aquella misma mañana, y a la misma hora, el propio Luis Portillo estaba reunido con David Taguas en La Moncloa coordinando el plan de rescate".

Afortunadamente para las Cajas y para los impositores andaluces, fue imposible tomar decisiones en firme, puesto que cada uno de ellos se escudó en la necesidad de transmitir la petición que acababan de recibir a sus respectivos presidentes para que obraran en consecuencia. En suma, las entidades lograron evitar con esa treta el pago de ese impuesto revolucionario. Poco después, el día de los Inocentes, Portillo era defenestrado de Colonial.

0 comentarios: